SIDA – no desfallecer en la lucha
El 1° de diciembre se celebra el Día Mundial de la Lucha contra el Sida. Se trata de una batalla que se debe llevar adelante diariamente, con información, prevención y lo que es más importante, sin ningún tipo de prejuicio, que, como he defendido hace años, agrede más que la enfermedad. A pesar de los avances alcanzados en los últimos años, no nos olvidemos que surgen nuevas generaciones que no tienen el mismo conocimiento de la enfermedad que las anteriores adquirieron, siendo así más vulnerables al contagio de ese mal. Por lo tanto, pienso que es muy oportuno presentarles fragmentos de un texto de Karine Salles, del Portal Boa Vontade:
“A pesar de la tendencia a la estabilidad, la epidemia de HIV /Sida afecta de manera diferente a las diversas regiones del mundo. De acuerdo con el Informe Global 2011, del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre HIV /Sida (Unaids), existen 34 millones de personas con el virus. En Brasil, son cerca de 630 mil. La organización reconoció que las nuevas infecciones y muertes relacionadas con el Sida descendieron a los niveles más bajos, desde el pico de la epidemia en la década de 1990.
“El Dr. Pedro Chequer, coordinador general del Unaids en Brasil, resaltó en el Portal Boa Vontade, los avances brasileños para frenar la enfermedad. ‘Desde la década de 1990, el país adoptó la política de acceso al antirretroviral por el Sistema Único de Salud (SUS), y gracias a él, fue posible mantener esa política en la actualidad.’ Brasil fue uno de los pioneros en distribuir gratuitamente toda la medicación necesaria para el combate del virus.
“En el estudio, el programa señaló que el modelo brasileño de prevención del HIV y la asistencia al portador del virus es uno de los mejores del planeta, principalmente en el tratamiento a las poblaciones más vulnerables. Sin embargo, los datos registran que las regiones Norte y Nordeste sufren con el aumento de la mortalidad y con el número de nuevos casos. Y, de modo sorprendente, en la región Sur la epidemia ha crecido, así como las muertes. (...)
“El tratamiento es de costo relativamente alto y, según el Dr. Chequer, ‘varía de país a país’. En la actualidad, se gastan R$ 800 millones para atender a 200 mil pacientes, lo que da un promedio de R$ 4 mil por persona. ‘Ese costo, en la década de 1990, era superior a R$ 20 mil’, dijo el médico, que reforzó: ‘Debido a las investigaciones, lo más importante ahora es primero establecer un programa de movilización social, de los medios de comunicación, de la comunidad, de líderes locales, para que puedan involucrarse en este proceso. Y, segundo, analizar la cuestión de la ampliación de las pruebas para un diagnóstico más precoz’”.
El Dr. Pedro Chequer envió un e-mail al equipo del Portal Boa Vontade en el que revela su admiración por el Templo de la Paz, como es conocido el monumento más visitado de Brasília, Brasil: “Soy un frecuentador del Templo de la Buena Voluntad y siempre que hay visitas del exterior, las llevo para conocer el lugar. Este hecho se suma a mi misión de buscar informar y diseminar el conocimiento sobre el Sida”.
También en una entrevista al Portal Boa Vontade, encontramos el testimonio de la pedagoga Nair Brito, portadora del HIV desde hace 19 años: “Con 30 años de epidemia, muchas personas aún nos estigmatizan, y esto es malo. Es un desafío superado cada día, y te despiertas agradeciendo por estar viva, pidiéndole a Jesús que permanezcamos viviendo con dignidad”. Para finalizar, Nair advierte: “Quien no está infectado con el HIV, que se proteja. Protéjase en serio, porque no es bueno vivir con HIV, aun teniendo la medicación”.
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