Tabaquismo en la edad escolar
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 90% de los fumadores tuvieron el primer contacto con el tabaco en la edad escolar, entre los 5 y 19 años. El programa “Educación en Debate”, de la Super Red Buena Voluntad de Radio, trató este grave tema, buscando demostrar la enorme responsabilidad de los educadores, así como de la familia, en la búsqueda de mecanismos que prevengan la adopción del hábito de fumar, puerta de entrada para drogas más pesadas.
En la entrevista concedida a la pedagoga Suelí Periotto, la Dra. Mônica Andreis, máster en psicología clínica por la Universidad de São Paulo (USP), vicedirectora de la Alianza para el Control del Tabaquismo (ACT), en Brasil, destacó el papel de la escuela en la prevención de este vicio: “Es la oportunidad que el educando tiene de aprender un poco más sobre el tabaquismo y con eso, tener más conciencia de la importancia de no empezar a fumar. La escuela puede contribuir mucho no solo enfocando la cuestión de la salud, sino profundizando en el tema con la discusión sobre por qué las personas fuman, el papel que cumple la publicidad, y cuánto afecta no solo a la salud, sino también al medio ambiente en que se vive. Las instituciones de enseñanza pueden tratar el asunto bajo diferentes ángulos. La acumulación de colillas de cigarrillos, por ejemplo, es una de las cosas que más contaminan las playas, que matan animales marinos, porque se atragantan con ellas; también muchos bosques acaban siendo devastados para la producción del cigarrillo, pues se usa leña, se usa papel. Y esta información es muy importante. Los alumnos pueden llevar ese conocimiento a sus casas y compartirlo con sus padres, familiares o con la propia comunidad. La escuela puede organizar una feria de ciencias, y eso puede ser un tópico a discutir; presentar una película, convocar a la familia para que participe y después hacer un debate. Tenemos varias maneras de explotar el tema, y los educadores tienen un papel fundamental en la prevención del tabaquismo”.
Ley anti-humo
Según la Dra. Mônica, la ley anti-humo contribuye para colaborar en que los niños no tengan interés por el cigarrillo: “Hoy, ese impedimento es una manera de evitar la atracción por empezar a fumar, porque las personas ya no fuman en todos los lugares como se hacía antiguamente. Esto, aliado al enfoque de la escuela sobre el tema, de forma constante, acaba favoreciendo a que no se empiece a fumar en la adolescencia”.
El poder de la influencia
Al preguntarle sobre los aspectos emocionales que pueden influir en el niño y el joven con relación al tabaquismo, la Dra. Mônica aclaró también: “Algunos factores favorecen que ellos experimenten o empiecen a fumar. Nosotros sabemos que los hijos de padres fumadores tienen mayor tendencia a convertirse en fumadores en el futuro. Muchos niños empiezan a fumar debido a ese modelo que ellos tienen en casa, o también en la escuela, de aquel profesor que admiran y que fuma. De ahí la necesidad de esa conciencia por parte de los familiares y de los profesores, del poder de influir que tienen sobre la vida de un niño. Además, en la adolescencia, nosotros pasamos por una serie de modificaciones. Es natural que la inseguridad aparezca y, a veces, el cigarrillo es la válvula de escape en la búsqueda de un placer instantáneo. Es importante que el niño tenga la percepción de que fumar no le proporcionará apoyo o le garantizará éxito en la vida. El cigarrillo es una droga y una vez que el niño lo experimente, puede convertirse fácilmente en un dependiente químico. Entonces, si él tiene esa conciencia, naturalmente, va a decir que no”.
Muerte evitable
En sus consideraciones finales, la psicóloga Mônica Andreis enfatizó que “el humo pasivo es considerado por la Organización Mundial de la Salud la primera causa de muerte potencialmente evitable. Es una dimensión muy grande. En verdad, como nosotros teníamos antes toda una evaluación cultural de que el tabaquismo no era un problema tan grave, las personas eran un poco negligentes en eso. Hoy tenemos información y claridad sobre lo perjudicial del tabaco para la salud. Es importante también que la escuela pueda valorizar esto y de hecho incorporar actividades para ayudar a los jóvenes en el conocimiento y en la prevención”.
Gracias, Dra. Mônica. En las escuelas de la Legión de la Buena Voluntad y en sus programas socioeducativos, el tema se trata con la seriedad debida. Es nuestra contribución, con el fin de advertir principalmente a las futuras generaciones sobre el efecto destructivo del tabaquismo.
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