El Amigo que vuelve
Hoy, hablaré sobre el regreso de un Gran Amigo de la Humanidad. Es un tema que trae mucha emoción a nuestras Almas. Independientemente de la línea de pensamiento que adoptemos, es unánime en nuestros corazones el deseo de tener a alguien cerca que nos oriente por los buenos caminos, que nos ejemplifique los caracteres elevados de convivencia espiritual, humana y social.
Observo en el regreso de Jesús, el Cristo Ecuménico, el Divino Estadista, al planeta Tierra, una bienaventuranza para todas las comunidades.
En mis charlas por radio, televisión, Internet y prensa, siempre he tratado de analizar este Sublime Acontecimiento. En una de ellas, en mi libro "Apocalipsis Sin Miedo", incluso antes de entrar en el actual milenio, consideré:
Tiempo de Dios
Jesús resucitó al tercer día. Fíjense: ¡resucitó! (Evangelio, según San Lucas 24:1 al 12):
"1. En el primer día de la semana, las mujeres que habían seguido a Jesús desde Galilea fueron al sepulcro, de madrugada, llevando los perfumes que habían preparado.
2. Y hallaron removida la piedra del sepulcro;
3. y entrando, no encontraron el cuerpo de Jesús.
4. Aconteció que estando perplejas por lo ocurrido, aparecieron delante de ellas dos Ángeles con vestiduras resplandecientes.
5. Tomadas por el temor, bajaron los ojos hacia el piso. Entonces, ellos les dijeron: ¿Por qué buscáis entre los muertos a Aquel que vive?
6. No está aquí. Ha resucitado. Acordaos de lo que os prometió, cuando aún estaba en Galilea.
7. Él os advirtió que el Hijo de Dios sería entregado en manos de pecadores y, crucificado, resucitaría al tercer día.
8. Entonces, ellas se acordaron de Sus palabras.
9. Y, volviendo del sepulcro, anunciaron todas estas cosas a los once, y a aquellos que allí estaban.
10. Eran María Magdalena, Juana, María madre de Santiago. Y las demás que estaban con ellas confirmaron estas maravillas a los Apóstoles.
11. Esos relatos les parecían como un delirio, y no creían en sus testimonios.
12. Pero, levantándose Pedro, corrió al sepulcro; y cuando miró dentro, vio solo los lienzos de lino, y se fue a casa maravillándose de lo que había sucedido".
Juan y Pedro
Referencia Divina
Dionisio
Jesús volverá al tercer día. Pero, en Su Tiempo, no según cálculos humanos, que están llenos de equívocos. Que lo diga Dionisio, el Exiguo (470-544). Erró en los cálculos que fueron utilizados por Gregorio XIII (1502-1585), en su reforma del calendario en 1582. El Cristo no puede valerse de una cronología que ya nació equivocada y que, además, no es utilizada por muchas naciones.
Gregorio XIII
Digamos, para argumentar, que el Tiempo para el análisis de los temas proféticos debería contarse desde que la Tierra surgió en el Universo. A partir de ahí, encontraríamos la fecha correcta para la época del Regreso de Jesús, ya que estaríamos de acuerdo con la Planificación Divina, según la cual este planeta fue estructurado.
Antes que todo, no podemos olvidar que el Cristo regresa todos los días en los corazones de Buena Voluntad, incluso en los de aquellos que no Lo alaban abiertamente, porque Él es una Sagrada Referencia al Bien, para la cual no debe haber límites insuperables. Es un fenómeno espiritual que ocurre con nosotros, para el cual precisamos ejercitar los ojos para ver y los oídos para oír, como el Maestro Celestial nos aconseja en sus mensajes a las Siete Iglesias de Asia, que hoy están en todo el mundo abarcando la Política, la Ciencia, la Filosofía, la Economía, la Religión, el Arte, el Deporte y así sucesivamente.
"El que tiene oídos para oír, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias del Señor. Al vencedor le daré de comer del Árbol de la Vida Eterna, que se encuentra en el Paraíso de mi Dios." (Carta de Jesús a la Iglesia en Éfeso, Apocalipsis 2: 7).
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